domingo, 7 de octubre de 2012

CLASES DE MAGIA

Haciendo Magia
Hacer MAGIA puede parecer muy complejo, pero eso no es cierto. TODOS hacemos magia CONTINUAMENTE, sólo que no somos conscientes de ello. Y si no conseguimos muchas veces que esa magia funcione, es sólo porque nos falta cierto CONOCIMIENTO sobre el modo correcto de hacerlo.
Por ejemplo, cada vez que contemplamos la tarta de cumpleaños con las velas encendidas...y formulamos un deseo... y soplamos con fuerza para que se cumpla nuestro deseo... estamos HACIENDO magia.

Pero...¿qué es la magia?. La MAGIA o hacer magia, es la capacidad de modificar una situación o circunstancia a nuestro antojo, transformar una situación en otra distinta. Cada vez que varío, cambio, transformo una situación, estoy realizando un acto mágico. Por poner un ejemplo: EL PAN. El PAN no resulta así desde un comienzo, requiere un proceso, la mezcla de unos ingredientes y un plazo de tiempo en el horno. El proceso de transformar esos ingredientes en una barra de pan, es la MAGIA.

Nosotros tenemos a nuestro alcance todos los ingredientes necesarios para conseguir transformarlos, "cocinarlos" y conseguir lo que deseemos. Pero, así como una persona que no haya aprendido a hacer repostería, aunque tenga los ingredientes, difícilmente conseguirá una tarta, nosotros podemos poseer los ingredientes necesarios para realizar un acto mágico y conseguir lo que deseamos, pero debemos aprender cómo "cocinarlos", o difícilmente lograremos el efecto deseado.

En los enlaces que véréis más abajo, encontraréis todas éstas recetas mágicas. La combinación de los ingredientes, las cantidades, los "tiempos de cocción"...

Pero si aprendemos unos sencillos principios básicos, cada uno de nosotros puede realizar sus propias recetas, crearlas, y no tener que atenerse únicamente a las que damos como ejemplos.

Exacto, las recetas mágicas que veréis más abajo son ejemplos recetas mágicas, pero cada uno puede inventar o crear las suyas propias.

¿Qué debemos tener en cuenta antes de hacer magia?.

Que, como en todo otro ámbito de la vida, la MAGIA no está exenta de normas. Hay una norma básica que JAMÁS podemos dejar de tener en cuenta: NUNCA PODEMOS UTILIZAR LA MAGIA PARA DAÑAR A NADIE, NI SIQUIERA A NOSOTROS MISMOS. Es cierto que existen otros tipos de MAGIA que dañan a otras personas, pero en ningún caso es la que aquí os ofrezco. ¿Por qué?. Por otro de los principios BÁSICOS a tener en cuenta: TODO cuanto hagamos, TODO, nos vendrá de vuelta, y no en la misma proporción, sino hasta en 10 veces más. Por tanto, si buscamos hacer el bien a través de nuestros trabajos mágicos, recibiremos mucho más bien y bueno a nuestra vida. Pero si buscamos causar daño, perjudicar a los demás, o doblegar su voluntad...ésto también nos vendrá de vuelta.

Si partimos de la base de éstos dos principios/normas, no tengamos miedo a realizar magia, pues nada malo sucederá. Seguro!.

Para realizar un acto mágico, no hay límites a lo hara de elegir los elementos que podemos utilizar, pues todo cuanto nos rodea puede ser un elemento válido. Pero, los elementos más utilizados para realizar magia son: Velas, Inciensos, Aceites, Plantas o Hierbas, Especias, Piedras o Minerales, e Ingredientes de Ritual específicos.

Existen distintos tipos de MAGIA. Esta clasificación se realiza en base al propósito que persigue. De todos modos, es importante aclarar que la magia SIEMPRE es la misma, y que sólo varía el fin de la misma. Por poner un ejemplo: el CUCHILLO. Es un instrumento muy útil y "bueno" cuando lo utilizo para abrir el pan y prepararme un bocadillo, pero si lo utilizo para clavárselo a traición a alguien y acabar con su vida...el instrumento ¿ya es malo?. Eso ocurre con la MAGIA. Ni es buena, ni es mala, es MAGIA, pero según sus propósitos, según el fin que persiguen, según sus objetivos, y según los elementos que utiliza, varía. Podemos clasificarla en:

MAGIA BLANCA.- Aquella que persigue el bien. Modificar todas las circunstancias difíciles en circunstancias favorables. De elevada moralidad y ética, nunca doblega la voluntad de nadie.

MAGIA NEGRA.- Aquella que persigue el mal. Causa daño, pérdida, ruptura,...No tiene en cuenta la voluntad de las personas implicadas. La más peligrosa y dañina.

MAGIA AMARILLA.- Conocemos así a la magia destinada a mejorar asuntos económicos, de dinero, trabajo y/o negocios.

MAGIA VERDE.- Es la magia que rige los asuntos de SALUD, y también la conocida

MAGIA NATURAL, que está en contacto directo con la naturaleza.

MAGIA AZUL.- Es aquella destinada a los trabajos mentales, control mental, dominio, relajación, manipulación...más "blanca" o más "negra" según su propósito.

Es imposible dar aquí todos los usos de cada uno de los elementos válidos para realizar magia...así que nos centraremos ahora en las más utilizadas, LAS VELAS.

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